¿Imposible de decir?

No sé si hay secretos más decisivos que los que una se guarda a sí misma. ¿Quién nos lo podrá contar? Acaso una intuición, un susurro u olor nos llama la atención. Una se mete en ello e intenta seguir los rastros de la criatura en plena noche; sea en bosques, arrecifes o sótanos.

Pequeñas paradas en el camino confirman su existencia. Hallazgos, descubrimientos, arman imágenes que nos comprometen aún más. La sospecha de algo importante y propio nos lanza en un movimiento expectante, con espíritu aventurero, con miedo, alegría. Cada artista a su manera. Curiosidad y suspenso se entrelazan en preguntas.

En este recorrido, Sava se topa con apariciones, cuasi fantasmas. Siluetas encendidas en una relación íntima con los ambientes. ¿Cuándo fue esto?

Viajes por tejidos en contracción, excrecencias, interioridades. Fantasías que se autoregeneran y autopenetran construyen el espacio por el cual deambula Fantuzzi. ¿Hacia dónde?

Una burbuja que sale de lo hondo del océano, o un globo de chicle que habita en nuestra cara a modo de órgano, podrían describir algo que se le presenta a Manzoni. Cápsulas que guardan alientos, suspiros que se vuelven a ir. ¿Por qué?

Benitez recorre la senda en noches artificiales donde el tiempo se descompone. Entes indefinidos entre lo animal y lo vegetal nacen de la descomposición. La estructura se vuelve aura gráfica. ¿Qué son?

Montero se zambulle en un mundo de canales y cables. Conductos, medios que conducen a la persona en plural. En tránsito, en edición. ¿Quién es?

Seres ondulantes, serpenteantes, guían a Comi a través de espacios cavernosos. Recovecos que albergan zzzzzz´s, y shhhh´s; luego, el corte, el agujero, la abertura de boca entreabierta a punto de. 

La imagen —la cosa— es muda de tan porosa. Frente a ella un secreto resuena en cavidades cada vez más pequeñas. Y una pregunta se abre lugar: ¿qué me pasa?

Ramiro Oller