Además, en los ensayos se trabaja con la música de Quinteto Revolucionario, con quienes llevan adelante encuentros individuales para revitalizar el diálogo con la música. “En estos encuentros —dice Rojas— se improvisa, se hacen cruces de sonido y movimiento y se intercambian las características de una disciplina a la otra. También abrimos el debate acerca de la crisis del tango en la actualidad y sobre la obra de Astor Piazzolla.”
La residencia, entonces, problematiza el carácter oficial y canónico que ha adquirido el tango al mismo tiempo que busca ponerlo de manifiesto en el orden de lo escénico, yendo más allá de los límites institucionalizados.